Ninfa María
Qué fácil escribir en la angustia
¿Qué pasa con las expectativas cuando expectacaen?
La espera se triza de uñas blancas
yeso de paredes sin sistema más que
el sudor que refleja alegrías de otros tiempos
¿Qué pasa con los nervios cuando se activan tanto?
¿Cuándo salen por la borda y buscan arrojar todo
sin expectanada que pueda hacerle?
Porque las uñas ya están negras
y las ganas no aguantan un pelo más en el vaso
un agote más en los brazos caídos
de tanto monigote que me vio reír y llorar
y llorar y llorar
y no supo y no supe
qué hacer
y las aguas crecían en todos lados
ahora solo de la parte anterior de mi cara
pero tanta agua ya me aburrió
y eso que hay sequía
pero esa es de otro orden
otra raza
ojalá fuéramos de una buena estirpe
en la que supiéramos qué hacer
con las cartas que dictan tus ojos
cuando se ponen rebeldes
y no me quieren mirar
¿Qué hice yo para cobrar cualquier suerte?
¿Qué hice con cada párpado que se cerró sobre mí?
Qué tontas son las cosas que se cierran
Que se caen que se acaban
Que no tienen idea de conservar algo en el pecho
¿Cómo escribirte algo lindo con una espina
atravesada en la garganta?
Escribir, escribir algo
que se vuelve alien después de un tiempo
Es extraña la brecha entre mis yo
entre mis desvaríos hilvanados de ideologías
y la máquina de moler carne
Mi carne resiste el ácido de lo cotidiano
lo urbano los precios la droga
Mi carne no quiere ser máquina
y se descompone
procura echarse a perder
desligar todo intento falaz de calzar
¿Calcetas dispares? yo nunca
cómo tan nube, cómo tan creisi
Si me tomo un trago de sol
cuando los hoyos negros vienen a tragarme
cuando la puerta en los oídos de la gente
tiene candados de metales pesadísimos
de intrigas planetarias
que nadie en realidad quiere abrir
y te absortas de mi absorta disposición
luego de que tus durezas me dejaron la piel seca
la boca arrojada
la espina ahí atragantando la tráquea
en el precipicio acosador
la angustia…
Es fácil escribir con las manos perdidas
en el invierno
Qué fácil es el fuego en el abandono del bosque
La angustia
tremenda hoja en blanco
para rayar con las entrañas
es un papel enorme
tamaño isla propia